Desde que volví a retomar mi afición por Nancy he visitado algún que otro mercadillo o ferias de antigüedades en busca de alguna niña que pudiera aumentar mi familia nancyera, pero las pocas que he visto tenían unos precios tan elevados que se quedaban allí. Sin embargo encontré ésta bonita Lesly que por tener alguna tara fue más asequible.
Tiene la carita pálida y los labios algo desgastados. Pero los ojos y pestañas perfectos.
Las piernas muy flojas, un poco rajadas en las piezas que se ajustan al cuerpo. Pero un pelo precioso.
Y un pie mordido por algún animal doméstico, que con los zapatos no se aprecia.
Llegó vestida con ropa de Nancy que le quedaba enorme y no ha sido hasta ahora que puede estrenar algo de su tamaño.
Una camiseta de estrellitas.
Con un peto vaquero.
Unos calcetines rosas con lacitos.
Y sus típicos zapatos de pulserita.
Ha estado probandose varias pincitas para el pelo, no se decidía cuál le quedaba mejor.
Poco a poco aumentaremos su vestuario, con la ayuda de unos patrones que hemos recibido gracias la dueña de la Biblioteca Silvestre.